el tiempo
Reflexiones,  Vivencias personales

8 claves para organizar nuestro tiempo

Muchas veces nos quejamos por falta de tiempo para hacer todas aquellas cosas que deseamos hacer y nos preguntamos ¿cómo consiguen otras personas atenderlo todo? Y está muy bien que nos hagamos esa pregunta, pues significa que somos conscientes de que con el tiempo que tenemos podemos hacer más.

Esta inquietud se nos muestra con más virulencia cuando nos planteamos iniciar alguna actividad nueva, por un cierto tiempo o para mantenerla perennemente en nuestra vida. Esto puede ser: estudiar para tener acceso a la universidad, practicar algún deporte o ejercicio físico para mejorar la salud, dedicar más tiempo y de más calidad a tus hijos, pareja, padres, aprender a tocar un instrumento, leer un libro, terminar tu curso escolar con mejores calificaciones, etc. La lista sería interminable.

Así que comencemos por el principio. El principio es saber dónde estás, a dónde pretendes llegar, y por qué camino. Sin duda habrás oído decir que todos los caminos conducen a Roma, pero lo ideal es que vayamos por el que más se acomode a nosotros y no lo contrario.

Para saber dónde estás, primero pon por escrito al menos durante 15 días, cómo inviertes tu tiempo desde que te levantas hasta que nuevamente te acuestas.

Segundo, haz una lista con todos tus valores, cosas como familia (hijos) dinero, belleza, trabajo, bondad, religión, medio ambiente, solidaridad, etc. En fin, todo aquello que tú tengas como valores en tu vida, y después destaca los tres o cuatro que sean primordiales e intransferibles para ti.

Es decir, imaginemos que lo que deseas es hacer una carrera o maestría, que como mínimo cuesta 5 años de estudio, pero que un valor intransferible para ti, son tus hijos y la solidaridad. Ahora ya sabes que si surge alguna situación en que tus hijos requieran más tiempo del debido de ti, o si surge que eres una persona importantísima en alguna acción de socorro en la que se te requiera, puede que el camino hacia tu proyecto se retrase un poco y te cueste seis o siete años llegar a tu meta. Pero no te importará, porque seguirás siendo fiel a tus valores, que es el camino que mejor y que más feliz te llevará.

Si tu meta es de un corto periodo de tiempo, tal vez te interese ver este artículo: Acota tu mente

El tiempo

el tiempo

El tiempo es el bien más preciado que tenemos y además es limitado en esta realidad que estamos viviendo, por lo que es muy conveniente usarlo con sabiduría. Por ello, es muy importante que durante quince días anotemos todo aquello que hacemos y cuánto tiempo nos consume cada actividad. Esto nos permitirá organizar nuestro día a día, pues sabremos de que tiempo disponemos o de dónde podemos tomar más tiempo en caso necesario.

Decir NO a ciertas cosas es importante si quieres conseguir llegar a la meta propuesta, lo cual puede ser muy duro, pero créeme, es totalmente imprescindible. Puede que duela, puede que se enfaden contigo porque no lo comprenden, pero se tiene que hacer y al final todo pasa.

Ejemplos de la vida real

Una joven trabajaba de 7 a 14 horas a unos 8 km de su casa, por lo que acudía en coche. A la salida comía algo que se había preparado por la mañana y conducía 6 km hasta la universidad donde estudiaba. Al terminar y llegar a casa siempre tenía cosas que repasar, pero era tan organizada que le daba tiempo para todo. Incluso, bordaba unos preciosos y elaborados cuadros a punto de cruz que eran un primor con los que agasajaba a sus amistades.

Sin embargo, cuando decía que No era que NO, así que en época de exámenes, ella le pedía a su novio que no fuera a visitarla porque tenía que centrarse en los estudios. Aún así, alguna vez el novio iba a visitarla, pensando que le dedicaría un tiempo, y le tocaba pasar la tarde con sus suegros, porque ella no salía de la habitación para saludarlo, su NO era NO. Si interrumpía un rato sus estudios para tomarse un café, lo tomaba sola en la cocina y no hablaba con él. El esfuerzo que ella estaba haciendo, de trabajar y sacarse una carrera era lo suficiente importante para merecer el respeto de todos, si los demás no lo entendían, ella sí, y no podía jugarse un trimestre por dispersar su mente en charlar con su novio.

Otro ejemplo es el de una joven madre con dos niños, por las mañanas llevaba a sus hijos al colegio, de regreso hacía los recados o compras, para al llegar a casa centrarse en el aseo de la misma, con la intención de después de comer, poderse dedicar a unos estudios que estaba haciendo, y al regreso de sus hijos dedicarles el tiempo que necesitaban. Una de sus amigas sin hijos tomó la costumbre de visitarla a media mañana y quedarse a comer, lo cual le rompía todos los esquemas, por lo que tomó la decisión, cuando la amiga llegaba, de decirle sin invitarla a pasar: “Lo siento, estoy ocupada y no te puedo atender“.

Decir no, cuando aprecias a alguien, es muy duro, pero muy conveniente, pues cuando tú te respetas todos te respetan, y si alguien se enfada ya se le pasará o es que no merecía tu amistad.

Desde donde estamos

Bien, pues ya sabemos cuatro cosas primordiales para organizar nuestro tiempo:

– 1º dónde estamos, por medio de saber en qué se consume nuestro tiempo.

– 2º dónde queremos llegar, o tarea que queremos implementar en nuestra vida.

– 3º qué camino tomar, por medio de conocer los valores que son intransferibles para nosotros.

– 4º la importancia de decir NO a ciertas personas o cosas.

Organicémonos

Una vez que sabemos lo que queremos y lo que requerirá de nosotros, tenemos que montar el plan o estrategia. Lo primero es saber dónde está la meta y después los pasos que tenemos que dar conseguirlo.

En el ejemplo que hemos mencionado de hacer una carrera o maestría sabemos que nos tomará cinco años, por lo que comenzaremos planificando el primer año: cuándo comienza el reto, cuándo termina, y las metas intermedias que existen.

Normalmente, en España la universidad comienza en septiembre y termina sobre junio. Entre esas fechas tenemos dos exámenes fuertes, y algunos trabajos o proyectos que realizar, pero todo dentro de las fechas concretas. Muy importante, prestar atención a los días festivos y vacaciones que suelen ser bastantes. Puedes planificar durante esos días tus actividades en familia o amigos y tu descanso de estudios, para dedicarte a actividades más lúdicas y el tiempo de ocio.

Una vez hecho este estudio por meses y  por semanas, tal vez quieras delegar alguno de los arreglos para días festivos o vacaciones en alguien con quien quieras compartirlas.

Día a día

el tiempo

Así que ahora céntrate en tu día a día.

Lo primero que tienes que saber es que tienes que dormir las ocho horas de rigor, al menos no puedes prescindir de ellas por mucho tiempo.

Después, y nada más levantarte, un poco de ejercicio a ser posible al aire libre unos 40 minutos. Si no es posible, abre la ventana para respirar aire fresco y haz unos estiramientos. El aseo matutino, y el preciado desayuno.

Al terminar el desayuno céntrate en las tareas más importantes y más trabajosas, pero aún no encendemos el móvil ni miramos los correos. Si no, serás víctima de cosas de poca importancia y te consumirá mucho tiempo.

Crea hábitos, eso hará que te centres muy pronto en lo que tienes que hacer. Una tarea, siempre en el mismo sitio y a la misma hora.

Asígnate un tiempo para terminar cada tarea. Por ejemplo, entre 40 o 60 minutos y lo dejas.

Las tareas de menos de cinco minutos, tal vez te sirvan para cambiar de un tema a otro y te dan tiempo.

Por ejemplo, yo, como ama de casa, tengo muchísimas tareas de pocos minutos que si las encadenas todas duran mucho y no tienes sentimiento de logro, pero que si las realizas entre una cosa más trabajosa y otra te sirve para cambiar de posición y estirarte un poco.

Estudio una hora por la mañana y después saco las sabanas de la cama para que se aireen bien. Escribo una hora y hago el friegue del desayuno, o pongo la lavadora, o limpio una ventana. Todas estas son cosas que se hacen en pocos minutos, pero si las encadenas agotan. Para mi, limpiar todas las ventanas el mismo día es una tortura y me impiden estudiar o escribir.

Otro punto es agrupar tareas similares, volvamos a las amas de casa. Preparar una comida no es una tarea de cinco minutos, esta tarea te puede llevar mucho tiempo, pero ya que estás metida en la cocina, de paso puedes ir medio preparando la cena, para que tal vez a la noche solo sea calentar. Así no ensuciarás dos veces la cocina y ganarás tiempo.

Recapitulemos el día a día:

1º Dormir ocho horas.

2º Ejercicio.

3º Desayuno nutritivo.

4º Las tareas más importantes primero.

5º Crea hábitos, la misma tarea en el mismo lugar a la misma hora.

6º Asígnales un tiempo a cada tarea y la dejas.

7º Las tareas de cinco minutos o menos, te sirven para desconectar.

8º  Agrupa todas las tareas similares.

Espero que estas pequeñas estrategias para organizar tu tiempo te sirvan de provecho. Para mí es muy importante leer, escribir y asistir a conferencias o seminarios, para lo cual tengo que organizarme, pero uno de mis valores irrenunciables es mi familia y ese valor lo condiciona todo.

Muchas gracias por tu atención

Me encantaría saber cómo tú organizas tus días y si tienes un valor irrenunciable. Escríbeme en los comentarios del blog, de facebook o a través del email lolacampa001@gmail.com

Si te ha gustado mi post, ¡compártelo!

Dejar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

error

¿Te está gustando mi blog? ¡Compártelo con el mundo!